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El fantasma de la hiperinflación vuelve a instalarse en medio de la crisis venezolana


En medio de batallas campales por alimentos en supermercados, los precios aumentan semana a semana. Economistas estiman que el país podría cerrar 2015 con una inflación por encima del 200%.



Aunque Venezuela todavía no alcanzó una espiral inflacionaria similar a la de los países donde se produjeron los anteriores 56 casos, los economistas alertan que se está en la etapa previa de un fenómeno más propio de las naciones en guerra, la mala administración política (lo más acorde con lo que pasa en el Estado caribeño) o la transición de una economía cerrada a una de mercado.



Con un preocupante incremento semanal en el valor de los productos de la canasta básica (y que en algunos casos es directamente todos los días), el régimen de Nicolás Maduro debería aplicar medidas urgentes para que en el país no se repita un escenario como el padecido por Bolivia, Perú, Brasil y Argentina durante las décadas del '80 y el '90. Y en este sentido, algunos sectores del chavismo son partidarios de flexibilizar el polémico control de cambio.

Durante junio pasado, la canasta básica familiar sufrió un aumento del 26,5% según el relevamiento hecho a nivel nacional del Centro de Documentación y Análisis para los Trabajadores (Cenda). Su director Óscar Meza se atreve a calcular lapsos: "En 2016 con toda seguridad estaremos en hiperinflación si no se aplican de inmediato los correctivos necesarios".

Sin embargo, esta cifra también se puede considerar baja si se compara con la inflación general que registraron, en distintos momentos, los países que sufrieron los 56 casos de hiperinflación en la historia. Allí la subida de precios llegó a superar el 50% mensual, y ésa es la medida utilizada para calificar un episodio de hiperinflación.



En algunos rubros la situación se hace más evidente, y por ejemplo según el Cenda el último aumento mensual de la carne de res molida fue del 100,9%, ya que pasó de costar 458 a 920 bolívares, y esos ya son niveles hiperinflacionarios.

Para el director de la consultora Econoanalítica, Asdrúbal Oliveros, la economía de Venezuela parece tomar esa dirección. "Estamos en una especie de antesala a la hiperinflación general, porque Venezuela tiene la mayoría de los síntomas que antecedieron este fenómeno en otros países. En lo que va de este año calculamos un aumento de precios de 74,4%", afirma el experto.



Un panorama todavía peor

Frente a la poca o nula claridad del Banco Central de Venezuela (BCV) a la hora de revelar sus cifras, los analistas se ven obligados a confeccionar sus propios cálculos. Para finales de 2015, Ecoanalítica calcula que el índice general de inflación en Venezuela podría cerrar por encima del 200%, según publica el periódico El Nacional.

Específicamente en el rubro de alimentos, Meza también pronostica que la canasta básica del Cenda llegará a 2016 con un alza superior al 200 por ciento. Mientras que entidades internacionales como Bank of America reportaron para mayo una inflación anualizada de 108%, y calculan que al cierre rondará el 174 por ciento.



"Si hay una tasa mensual de inflación del 50% cada mes del año, la tasa anual sería de 12.875%",calcula Steve Hanke, profesor de la estadounidense Universidad John Hopkins. Si se llegara a dar un caso extremo como ése a finales de 2015, el valor de la canasta básica familiar en Venezuela, que en la actualidad es de 54.204 bolívares, podría llegar a los siete millones de bolívares en2017.

En 1996 la inflación anual en Venezuela llegó a 103%, la más alta reportada en la historia del país, pero a pesar de eso el Gobierno y los economistas venezolanos todavía son reticentes a la alternativa de la dolarización.

El martes pasado, en un foro organizado por Cedice sobre el tema, todos los presentes coincidieron en que éste no es el mejor momento para adoptar a la divisa estadounidense como la nueva moneda nacional. Los especialistas argumentan que no sería positivo mientras siga habiendo unasobrevaloración del bolívar oficial ante el dólar y las reservas internacionales estén bajas. Fuente: Infobae


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