Valeria Gorgetti Licenciada en Nutrición explica cómo mantener hábitos saludables en una época marcada por reuniones y comidas abundantes.
En el marco de las celebraciones de fin de año, la Licenciada en Nutrición Valeria Gorgetti (MP 3731) dialogó con Sintonía sobre los hábitos alimentarios durante las fiestas, una etapa caracterizada por reuniones sociales, comidas abundantes y consumo elevado de bebidas alcohólicas.
Durante la entrevista, la profesional remarcó que el foco no debe estar en las restricciones extremas, sino en la construcción de hábitos saludables sostenidos en el tiempo. “La alimentación no se trabaja solo para una fecha puntual, sino como un proceso diario”, explicó.
Gorgetti señaló que en meses como diciembre, atravesados por múltiples eventos sociales, resulta clave mantener una alimentación equilibrada fuera de los encuentros. Un desayuno adecuado, colaciones si se extienden los horarios entre comidas, almuerzos completos y cenas planificadas ayudan a llegar a las celebraciones sin excesivo apetito.
En ese sentido, descartó prácticas habituales como “saltear comidas” para compensar una cena festiva. “Eliminar alimentos durante el día suele generar más hambre y favorece excesos posteriores, además de provocar malestares digestivos”, indicó. La recomendación es sostener un día alimentario habitual y, en el evento, adaptar las porciones y elegir con criterio.
Otro punto abordado fue la importancia de la hidratación. El consumo regular de agua antes y durante las reuniones contribuye a moderar la ingesta de alimentos y a mejorar el funcionamiento digestivo. Asimismo, aconsejó evitar el “picoteo constante”, especialmente en celebraciones extensas, y respetar intervalos de al menos una hora y media entre ingestas.
Respecto al alcohol, Gorgetti advirtió que suele subestimarse su impacto. “El alcohol aporta muchas calorías y no genera sensación de saciedad, por lo que se consume en exceso sin advertirlo”, explicó, señalando que puede resultar más perjudicial que algunos alimentos sólidos.
La nutricionista también se refirió a problemáticas frecuentes como el hígado graso, cada vez más presente, asociadas al sedentarismo, al sobrepeso y a cenas desequilibradas. “Es común que la última comida del día sea pobre en vegetales y rica en harinas o grasas, lo que dificulta la digestión nocturna”, afirmó.
En cuanto a la actividad física, destacó la importancia de incorporarla de manera gradual. Más allá del ejercicio estructurado, recomendó sumar movimiento cotidiano: caminar, usar la bicicleta o reducir el uso del vehículo. “La actividad acumulada también genera beneficios y ayuda a formar el hábito”, sostuvo.
Finalmente, Gorgetti subrayó la necesidad de consultar siempre con profesionales de la salud y no dejarse llevar por información confusa que circula en redes sociales. “Cada organismo es distinto y necesita un abordaje personalizado”, concluyó.
La licenciada atiende los días jueves en Monte Maíz, en San Luis 1150, y cada 15 días los viernes por la mañana en el Centro de Salud de Colonia Barge.
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